Servirás para mi
Pablito era un niño de piel negra, no le gustaba ir a la escuela porque sus compañeros lo discriminaban, pero el cómo lo valiente que es los ignoraba…
Un día de camino a la escuela se encontró con unos hombres, estos hombres para a fumar y Pablito siguió adelante, cuando Pablito paso por el lado estos hombres le taparon la boca y le pusieron una bolsa en la cara, Pablito no sabía cómo escapar, después de un tiempo Pablito se despierta y por un huequito de la bolsa logra ver que se encontraba en una casa muy grande con mucho jardín.
Le quitaron la bolsa a Pablito y lo llevaron dentro de la casa.
Dijeron, señor acá está el negro, el señor que al parecer es el dueño de la casa le responde bien hecho, y le pregunta al niño cómo te llamas, me llamo Pablito, soy David, debes agradecerme te saque del mal estado en que vivías, Pablito: ¡pero y mi familia ¡Estará bien sin ti no les eras de mucha ayuda!
Llevan a Pablito a el sótano de la casa, le dicen este es tu nuevo hogar, servirás para mí y yo te daré techo y comida, mañana empezaras a trabajar allí en el sótano se encontraban otros niños, hombres, y mujeres de piel de color negra.
Pablito toda la noche lloro extrañaba a su familia. Lo que él no sabía es que su familia también lloraba por él, su familia lo amaba mucho.
Ya al día siguiente levantaron a todos a las 5:00 AM, Pablito hace todo lo que le dicen, después de varios meses Pablito se convierte en un muy buen trabajador.
Pablito en su tiempo libre planeaba como encaparse, extrañaba mucho a su familia. El niño ya tenía un plan para escapar solo era llevarlo a cabo.
Al día siguiente Pablito dice ya no puedo más, quiero ver a mi familia, decide que en la noche dará a cabo su plan de escape.
Eran las 10:15 PM Pablito de organiza y sale por una ventana que se encontraba en el sótano, camina despacio por todo el jardín y pasa la cerca, Pablito corre y al parecer nadie se dio cuenta, ese camino en el cual se encontraba es muy largo pero no se rinde y al pasar de un tiempo amanece y se encontraba en el pueblito donde solía vivir el con su familia, corre y corre y toca con fuerza la puerta de su casa, su madre le habré y dice estas bien, donde estabas, los dos se ponen a llorar, entran a la casa, y al pasar de los días capturan a el señor David, por explotación infantil entre otros cargos, los esclavos que se encontraban allí fueron liberados y todos volvieron a tener libertad.
Para poder combatir el racismo es necesario hacer consciencia en las personas que todos somos iguales no obstante hay personas que no siempre van a aceptar que son iguales a alguien de menor sociedad económica.
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